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El ministro de Hacienda chileno, Mario Marcel, ha anunciado este martes que el Gobierno de Gabriel Boric recibió 88 propuestas de 54 empresas provenientes de una decena de países para explotar los 26 salares disponibles en Chile. La Administración de izquierdas cerró la noche del lunes el plazo para que el sector privado mostrara su interés de inversión. “Para los que pensaban que estábamos atrasados, nos estamos poniendo rápidamente al día”, sostuvo el secretario de Estado en la decimoséptima Conferencia de Ciudades Latinoamericanas en Santiago de Chile organizada por el Consejo de las Américas (Americas Society/Council of the Americas). El próximo 9 de julio se conocerán los resultados para desarrollar este año “un proceso competitivo” de licitación de contratos de explotación de litio en el país sudamericano.
”No vamos a implementar nuestra producción en 10 a 15 años más, la vamos a implementar el próximo año. Y vamos a obtener una combinación de adventures público-privados con proyectos también íntegramente privados en una multiplicidad de salares, al tiempo que mantenemos 30% del área de salares protegidas”, informó Marcel. El jefe de la billetera fiscal chilena aprovechó la cita clave para entablar conexiones con el mundo de los negocios en América Latina para enviar un mensaje de tranquilidad a la región: el período de inflación importante, de desequilibrios externos y de gran volatilidad cambiaria es cosa del pasado. “Esa parte de trabajo ya está hecha en lo fundamental, pese que le agregamos otros elementos de desestabilización adicionales, tanto del lado de la economía como del lado de la política. Pero todo eso ya pasó”, sostuvo Marcel.
El presidente de la estatal chilena Codelco, Máximo Pacheco, quien también participó del foro tras llegar esta mañana de Europa, donde fue parte de la comitiva que acompañó al presidente Gabriel Boric en su gira, sostuvo: “Todos sabemos que lo que tenemos que hacer es una transición energética y esa se llama descarbonizar, enfrentar el cambio climático, y al final del día electrificar el mundo”. Para hacer eso, sostuvo, el mundo necesita mucho más cobre y mucho más litio. Pacheco destacó que Chile tiene una de las mayores reservas de cobre del mundo y, en el caso de las reservas de litio, existe el llamado triángulo del litio formado por Chile, Bolivia y Argentina. “Bolivia tiene más que nosotros, pero el litio en Bolivia viene con magnesio y el litio necesita niveles de pureza casi perfectos”, apuntó.
Codelco y la Sociedad Química y Minera de Chile (SQM) llegaron a un acuerdo para la explotación en conjunto del litio en el salar de Atacama. La asociación público privada de la que se conocieron los detalles a finales de mayo incluirá la creación de una nueva sociedad que comenzará a operar en enero de 2025, donde la estatal tendrá la mayoría de las acciones (50% más una), y les permitirá producir el llamado oro blanco hasta 2060. Con esto, el Estado chileno entrará directamente como productor de la pujante industria minera. “No solo estamos apuntando a aumentar la producción. No solo estamos diciendo que vamos a producir más litio con menos agua, sino que estamos creando un modelo público- privado que mucha gente lo ve con desconfianza. Lo bueno es que ni Codelco ni SQM lo ven con desconfianza”, aseguró.
”Pero aquí está la mala noticia”, advirtió Pacheco tras describir las oportunidades de la industria minera del país sudamericano. En 1990, apuntó, Chile producía un millón y medio de toneladas -1,2 millones de Codelco- y para el 2004 la cifra aumentó a 5,5 millones de toneladas principalmente porque se instalaron las grandes mineras del mundo. “Llevamos 20 años con una producción de cobre estancada. La pregunta que nos hacen es si el mundo necesita cobre, cuánto van a poder aumentar su producción para llenar esta demanda insatisfecha. La respuesta nuestra no es muy clara, porque tenemos demasiados temas pendientes”, aseguró Pacheco en relación a construir una legitimidad social para desarrollar la minería, innovar y hacer una minería distinta, que no use agua continental.
El cobre en Chile se produce en zonas desérticas donde el agua es crítica. Codelco consume 5.500 litros por segundo de agua. “Somos la cuenta de luz número uno de Chile, con el 10% de toda la demanda de la sociedad chilena”, dijo el presidente de la cuprifera estatal. “Si Chile no aumenta su producción de cobre, Chile le está haciendo la vida más difícil al planeta en su transición energética. Ese es un mensaje que escuchamos claro en Europa y en el mundo”, añadió.
Marcel remarcó que América Latina está pasando por un momento particular de atención internacional y que lo importante es ver cómo los países lo van a aprovechar porque “no va a durar para siempre”. En el caso de Chile sostuvo que la fuente de ventaja comparativa del país sudamericano no es solo la de los recursos naturales no renovables, también lo es el litio, las energías renovables, la producción de energía verde y la economía digital. Y que ahí es donde están dando los primeros pasos.
El Consejo de las Américas escogió celebrar la cita en Chile por “su economía estable, ubicación estratégica y compromiso con la sostenibilidad”. La economía chilena creció un 3,5% en abril y la perspectiva de las entidades financieras es que en el segundo trimestre se registre un Producto Interno Bruto de entre el 2,6% y el 3,1%, la mayor alza en dos años. Susan Segal, presidenta de la organización empresarial estadounidense, destacó esta mañana cómo la producción y exportación de recursos estratégicos, como cobre, litio e hidrógeno verde están permitiendo que Chile se consolide como un “protagonista de la transición energética”.
“Chile tiene la oportunidad de ser un destino de inversión que aporte valor agregado a los productos en la cadena manufacturera, lo cual generaría más puestos de trabajo de calidad y un aumento en la actividad económica”, planteó Segal, gran conocedora de la realidad chilena. Pero como advirtió el ministro Marcel, América Latina está pasando por un momento particular de gran atención internacional y hay que saber aprovecharlo porque “no durará para siempre”.
Fuente: El País